En Kyklos trabajamos con el propósito de movilizar junto a las personas una vida en armonía con nuestro entorno, en línea con lo que también significa ser una empresa B: velar por el bienestar de las personas, de las comunidades y de la naturaleza.
Sin embargo, pese al camino de triple impacto que hemos emprendido, al igual como lo han hecho casi doscientas empresas asociadas a Sistema B en Chile y cerca de tres mil quinientas en más de setenta países, pareciera que, en ocasiones, la cuestión medioambiental cobra mayor atención que el eje social o que, también, la interrelación entre un eje y otro, no se cultiva lo suficiente.
Actualmente el cambio climático es una de las mayores amenazas que enfrenta la sociedad moderna, y a nivel local está el problema de la basura percibido como uno de los más importantes. A raíz de estos se han desarrollado alternativas de desarrollo sustentable, de reducción de la huella de la sociedad en el planeta, de aprovechamiento de recursos naturales, y de gestión de minimización de residuos. Sumado a lo anterior, vivimos tiempos desafiantes, no solo en Chile. Una crisis sanitaria de impacto mundial, tensiones político-sociales e incertidumbre económica, marcan la pauta actual.

Por eso en Kyklos nos hemos propuesto izar una bandera también por nosotros. Al trabajar por el desarrollo de una cultura ambiental hemos encontrado significativas oportunidades de índole social y personal. Además, hemos logrado establecer combinaciones interesantes y exitosas para construir un mejor futuro para todos. Por ejemplo, de cultura ambiental, educación e innovación, que caracteriza el proyecto Interescolar Ambiental, desarrollado en conjunto con el Ministerio de Educación; de reciclaje y comunidades, que describe nuestro servicio de relacionamiento comunitario con colegios; de inclusión laboral y gestión de residuos y equipos electrónicos, que ha dado vida al Centro Inclusivo de Reciclaje; y del mundo empresarial y la ciudadanía, en base a la que hemos desarrollado campañas masivas en torno a temáticas ambientales, entre otras.
Más que convertirnos en verdes actores movilizados contra el cambio climático, ponemos el acento en las necesidades de las personas, en sus gustos, sus sueños y en la diversidad que nos representa, para impulsar en conjunto una nueva campaña, una visión celeste, que se construya a partir del vínculo que tenemos con el medioambiente, pero que también se inspire en las vivencias de la gente. No nos olvidemos a nosotros, los habitantes de este maravilloso planeta.

Javier Peró:
Gerente General, Kyklos